Después de haberlas visto en el super, no pude con la curiosidad y terminé comprando algunas de las frutas que no conocía. Tienen precio por unidad inclusive.
De izquierda a derecha: granadilla, pitahaya y chayote. La piel de la granadilla es dura como un plástico, al abrirla tiene un racimo de semillas rodeadas de pulpa dulce; la pitahaya es similar a un higo y el chayote no tenía mucho sabor.
Me quedaron algunas que no llevé porque venían en paquetes, noni y una que figuraba como mbole. Las que conozco, pero no compré son: cas, maracuyá y guanabana.
Tropic Thunder
Al final, en todo viaje sale una famosa argentineada, no las puedo evitar, es algo natural que uno logra por ser quien es.
Esta vez, de alguna manera, terminé en un helicóptero rumbo a un lugar en la cima de uno de los cerros boscosos impenetrables, de donde se tenía una panorámica impresionante del Océano Pacífico, se veía la costa de Puntarenas, y -según el que sabía- muy a lo lejos ya estaba Nicaragua.
Es la primera vez que viajo en helicóptero y no pudo ser mejor, el helipad estaba en un hotel casino ex-mansión manejado por un tipo estilo Al Pacino en Ocean's Thirteen. Los próximos aterrizajes fueron en planicies sobre las montañas.
La perpectiva en las curvas es vertiginosa, quedás mirando de cara al piso como en una montaña rusa; pero el paseo es muy suave, el helicóptero era un Bell Ranger y practicamente es un auto con hélices.
En el medio del camino vimos cascadas y ríos, uno de ellos infestado de cocodrilos tomando el sol matutino, no les gustó mucho que anduvieramos tan cerca y se dispersaron instantáneamente desapareciendo en una explosión de agua barrosa.
La sensación de bajar del helicóptero y ser recibido en un hotel, no tiene precio.
Al final, me olvidé el paraguas en el helicóptero y me di cuenta justo cuando se estaba yendo.
Esta vez, de alguna manera, terminé en un helicóptero rumbo a un lugar en la cima de uno de los cerros boscosos impenetrables, de donde se tenía una panorámica impresionante del Océano Pacífico, se veía la costa de Puntarenas, y -según el que sabía- muy a lo lejos ya estaba Nicaragua.
Es la primera vez que viajo en helicóptero y no pudo ser mejor, el helipad estaba en un hotel casino ex-mansión manejado por un tipo estilo Al Pacino en Ocean's Thirteen. Los próximos aterrizajes fueron en planicies sobre las montañas.
La perpectiva en las curvas es vertiginosa, quedás mirando de cara al piso como en una montaña rusa; pero el paseo es muy suave, el helicóptero era un Bell Ranger y practicamente es un auto con hélices.
En el medio del camino vimos cascadas y ríos, uno de ellos infestado de cocodrilos tomando el sol matutino, no les gustó mucho que anduvieramos tan cerca y se dispersaron instantáneamente desapareciendo en una explosión de agua barrosa.
La sensación de bajar del helicóptero y ser recibido en un hotel, no tiene precio.
Al final, me olvidé el paraguas en el helicóptero y me di cuenta justo cuando se estaba yendo.
Jurassic Park
El viaje empieza yendo a la provincia de Alajuela. Una de las atracciones principales en Costa Rica son las plantaciones de café, el café históricamente fue el producto premium de exportación y permitió impulsar el desarrollo del país.
Las plantaciones de café tienen sectores turísticos donde explican como se siembra, cultiva, cosecha, separa, seca, tuesta, muele y distribuye el café, así como degustación de las distintas variantes de granos y de procesos de los estilos clásicos.
Café tan sabroso que pude llegar a entender porque se prefieren tomar sin azúcar. Otra cosa que noté, es que el café en general y aunque sea de tostado intenso, es suave.
Cerca de las plantaciones y siguiendo el camino en las montañas, se puede llegar al Parque Nacional Volcán Poás, con uno de los cráter activos más grandes del mundo, en el mismo lugar hay otro cráter extinto con una laguna y bosque.
La caminata al volcán es breve y la vista es impresionante, es muy profundo y tiene un ojo verde/celeste claro de un líquido que mezcla las emanaciones con la lluvia y la humedad, una caldera de ácido.
El olor que se siente es el mismo de algunos lugares alrededor de los géiser en el Parque Nacional Yellowstone. El paisaje impacta como lo hace el ver un cañón, de la nada aparece el panorama profundo e inmenso que a la vez es irreal.
Necesitaba un gran angular para tomarlo completo, termine haciendo un panorama de varias fotos. En los alrededores hay muchos helechos, "sombrillas de pobre" y también las plantas que le dan el nombre al volcán y a la zona, con flores amarillas y espinas largas.
Quetzales, colibríes y tucanes son los habitantes populares de los bosques, aunque me hubiese gustado haberlo encontrado no pude ver un quetzal, la única imagen sigue siendo un cuadro en la casa de mis abuelos.
Entre la densidad de los bosques hay saltos de agua, algunos de bastante altura y caudal, uno de los más famosos es el de San Fernando.
La espesura de las nubes separa en capas la imagen del paisaje haciendo un collage de árboles en degradé. Esto es el Parque Nacional Braulio Carrillo.
Me encontré con la ranita verde de ojos rojos, un clásico de cualquier galería de imágenes digitales del siglo pasado. Junto a esa estaban las ranas venenosas blue jeans -también suelta- y las de camuflaje negro y verde. El veneno de la piel puede afectar si entra entra en contacto con una herida abierta, por lo cual, se usaban para los dardos venenosos. En el serpentario tenían la coral y falsa coral, aparte de otras, mas o menos venenosas. Había muchas de las mariposas comunes y algunas mas exótica, escarabajos metálicos en dorado y plateado -nunca los había visto y si los vi, me olvide- luego mas colibries, monos en extinción y otras aves enjauladas.
En varias oportunidades se cruza la provincia de Heredia, esta vez con destino a un tramo navegable del río Sarapiquí, el lugar es muy parecido al Tigre: con lanchas grandes tipo colectivos pero despoblado. Al recorrer el rió, el silencio se rompe con el motor y a veces la lluvia o el grito de los monos aulladores; el tipo que manejaba alcanzo a ver un murciélago, un caimán, mas monos y por ultimo un cocodrilo; a ninguno lo pude ver directamente porque no lleve anteojos -los vi con la cámara- salvo el cocodrilo, lo creí un tronco hasta que se aburrió de las miradas.
Las plantaciones de café tienen sectores turísticos donde explican como se siembra, cultiva, cosecha, separa, seca, tuesta, muele y distribuye el café, así como degustación de las distintas variantes de granos y de procesos de los estilos clásicos.
Café tan sabroso que pude llegar a entender porque se prefieren tomar sin azúcar. Otra cosa que noté, es que el café en general y aunque sea de tostado intenso, es suave.
Cerca de las plantaciones y siguiendo el camino en las montañas, se puede llegar al Parque Nacional Volcán Poás, con uno de los cráter activos más grandes del mundo, en el mismo lugar hay otro cráter extinto con una laguna y bosque.
La caminata al volcán es breve y la vista es impresionante, es muy profundo y tiene un ojo verde/celeste claro de un líquido que mezcla las emanaciones con la lluvia y la humedad, una caldera de ácido.
El olor que se siente es el mismo de algunos lugares alrededor de los géiser en el Parque Nacional Yellowstone. El paisaje impacta como lo hace el ver un cañón, de la nada aparece el panorama profundo e inmenso que a la vez es irreal.
Necesitaba un gran angular para tomarlo completo, termine haciendo un panorama de varias fotos. En los alrededores hay muchos helechos, "sombrillas de pobre" y también las plantas que le dan el nombre al volcán y a la zona, con flores amarillas y espinas largas.
Quetzales, colibríes y tucanes son los habitantes populares de los bosques, aunque me hubiese gustado haberlo encontrado no pude ver un quetzal, la única imagen sigue siendo un cuadro en la casa de mis abuelos.
Entre la densidad de los bosques hay saltos de agua, algunos de bastante altura y caudal, uno de los más famosos es el de San Fernando.
La espesura de las nubes separa en capas la imagen del paisaje haciendo un collage de árboles en degradé. Esto es el Parque Nacional Braulio Carrillo.
Me encontré con la ranita verde de ojos rojos, un clásico de cualquier galería de imágenes digitales del siglo pasado. Junto a esa estaban las ranas venenosas blue jeans -también suelta- y las de camuflaje negro y verde. El veneno de la piel puede afectar si entra entra en contacto con una herida abierta, por lo cual, se usaban para los dardos venenosos. En el serpentario tenían la coral y falsa coral, aparte de otras, mas o menos venenosas. Había muchas de las mariposas comunes y algunas mas exótica, escarabajos metálicos en dorado y plateado -nunca los había visto y si los vi, me olvide- luego mas colibries, monos en extinción y otras aves enjauladas.
En varias oportunidades se cruza la provincia de Heredia, esta vez con destino a un tramo navegable del río Sarapiquí, el lugar es muy parecido al Tigre: con lanchas grandes tipo colectivos pero despoblado. Al recorrer el rió, el silencio se rompe con el motor y a veces la lluvia o el grito de los monos aulladores; el tipo que manejaba alcanzo a ver un murciélago, un caimán, mas monos y por ultimo un cocodrilo; a ninguno lo pude ver directamente porque no lleve anteojos -los vi con la cámara- salvo el cocodrilo, lo creí un tronco hasta que se aburrió de las miradas.
Nunca para de llover
Así como en "El Cuervo", pero sucede en un lugar en el medio de Centro América.
Hace dos días que llueve casi de corrido, quizá se suspende por un instante, torrnándose en una llovizna suave o algo un poquito más ligero, pero de la misma manera, vuelve a transformase en un diluvio, y en general, tiende a esa abundad de agua la mayoría del tiempo.
Hoy muy temprano en la madrugada (2:00) se despejó por un par de horas y desde la cama, pude ver a travéz de la ventana detrás de mi almohada una luna llena enorme que era prácticamente la única luz brillando en el cielo, el reflejo iluminaba toda la habitación en tonos azulados; creo que esa fue la primera vez que me quedé dormido bajo una imagen así.
En esta temporada se vive entre aguaceros, la llaman "temporada verde" y puede adivinarse fácilmente el motivo.
Hace dos días que llueve casi de corrido, quizá se suspende por un instante, torrnándose en una llovizna suave o algo un poquito más ligero, pero de la misma manera, vuelve a transformase en un diluvio, y en general, tiende a esa abundad de agua la mayoría del tiempo.
Hoy muy temprano en la madrugada (2:00) se despejó por un par de horas y desde la cama, pude ver a travéz de la ventana detrás de mi almohada una luna llena enorme que era prácticamente la única luz brillando en el cielo, el reflejo iluminaba toda la habitación en tonos azulados; creo que esa fue la primera vez que me quedé dormido bajo una imagen así.
En esta temporada se vive entre aguaceros, la llaman "temporada verde" y puede adivinarse fácilmente el motivo.
San José
Con el tema de tener el horario desvirtuadísimo me levanto temprano, quizá también ayuda el resplandor violento de la luz solar matutina. Aproveché el cielo algo despejado para sacar algunas fotos de los alrededores del barrio.
Me llamó mucho la atención ese hall de entrada, así que entré a curiosear. Es un museo de arte y como lo gratiuto siempre me atrae, terminé recorriendo la exposición. Había un grupo quizá de un curso de artes plásticas explicando la técnica de Chagall, la temática era mitología griega. Pensar sobre el lugar donde estaba mezclado con el arte europeo me resultó fascinante. En la calle el sol abrasaba.
Luego de una lluvia cortita, el panorama quedó nublado y seguí para el centro. Plazas y parques con predicadores; negocios y las franquicias de siempre. San José tiene varias peatonales donde podés ver gente hasta tomando el helado bajo la lluvia, está completamente asimilado el clima.
Hay varias casas modernas abandonadas decoradas dedicadamente con grafitti, inclusive del lado de adentro. Me gustaron mucho algunos stencils también.
La estación de trén que parece abandonada.
Después de la recorrida me acordé de ir al supermercado y un aguacero me agarró a la vuelta, el paraguas ayudó pero estaba para botas y piloto.
Me llamó mucho la atención ese hall de entrada, así que entré a curiosear. Es un museo de arte y como lo gratiuto siempre me atrae, terminé recorriendo la exposición. Había un grupo quizá de un curso de artes plásticas explicando la técnica de Chagall, la temática era mitología griega. Pensar sobre el lugar donde estaba mezclado con el arte europeo me resultó fascinante. En la calle el sol abrasaba.
Luego de una lluvia cortita, el panorama quedó nublado y seguí para el centro. Plazas y parques con predicadores; negocios y las franquicias de siempre. San José tiene varias peatonales donde podés ver gente hasta tomando el helado bajo la lluvia, está completamente asimilado el clima.
Hay varias casas modernas abandonadas decoradas dedicadamente con grafitti, inclusive del lado de adentro. Me gustaron mucho algunos stencils también.
La estación de trén que parece abandonada.
Después de la recorrida me acordé de ir al supermercado y un aguacero me agarró a la vuelta, el paraguas ayudó pero estaba para botas y piloto.
¡Pura Vida!
Esa frase se puede leer cada tanto en los caminos. Una de las cosas que más me llama la atención es como se choca el ambiente verde de los bosques y cerros inaccesibles con el avance de la civilización. Supongo que es un momento de cambio en el cual el incremento de población está transformando el paisaje.
En medio de las laderas se van escalonando las construcciones de pequeños pueblos que atraviesan las nubes y realmente parece imposible que puedan haber llegado a esos lugares, por lo espeso de la vegetación y por lo accidentado del terreno.
Según el horario de Costa Rica, amanece alrededor de las 5 y anochece alrededor de las 17, se siente como si vivieran 2 horas adelantados. Por eso es que muy temprano empieza el movimiento en la calle, aunque en el barrio donde estoy no se escucha más que los pájaros, haciéndose notar algún que otro bicho feo.
En medio de las laderas se van escalonando las construcciones de pequeños pueblos que atraviesan las nubes y realmente parece imposible que puedan haber llegado a esos lugares, por lo espeso de la vegetación y por lo accidentado del terreno.
Para los amantes del paraguas, esta región es ideal, como llueve todos los dias, el paraguas es parte de la indumentaria básica y en algunos casos de estilo también.
Según el horario de Costa Rica, amanece alrededor de las 5 y anochece alrededor de las 17, se siente como si vivieran 2 horas adelantados. Por eso es que muy temprano empieza el movimiento en la calle, aunque en el barrio donde estoy no se escucha más que los pájaros, haciéndose notar algún que otro bicho feo.
El Gourmet Caribeño
Entre las experiencias de los viajes, la degustación de comidas y bebidas no puede faltar. Hoy fuimos invitados por los ticos a un restaurant en medio de los cerros, los mismos que rodean la ciudad. Fue a traves de un camino en subida y terriblemente sinuoso que llegamos a este lugar tan concurrido y con una linda vista del paisaje. La carta era breve pero bastante consistente: carnes y vegetales asados, más al estilo barbacoa que al de las brasas. Cortes del tipo de una milanesa, con papa, ananá, banana todos asados, también frijoles, arroz y aguacate.
Riquísimo, cada plato tenía su encanto, empezamos con una entradita de chicharrones (cerdo frito) con yuca (mandioca) acompanada por limón verde exprimido. Para luego probar los elotes (choclo pero mas blanco) con matequilla (mas amarilla que la manteca) y avanzar al plato principal de carne asada de cerdo y demas. De postre, una porción de flan de coco (parecido al flan casero) y para tomar, cerveza con hielo. Se prepara también una cerveza michelada (o cubana), que es un vaso lleno hasta la mitad de jugo de limón con hielo y sal en el borde, al que se le va agregando la cerveza del porrón a gusto. Sin foto esta vez, porque sino se enfriaba la comida.
Riquísimo, cada plato tenía su encanto, empezamos con una entradita de chicharrones (cerdo frito) con yuca (mandioca) acompanada por limón verde exprimido. Para luego probar los elotes (choclo pero mas blanco) con matequilla (mas amarilla que la manteca) y avanzar al plato principal de carne asada de cerdo y demas. De postre, una porción de flan de coco (parecido al flan casero) y para tomar, cerveza con hielo. Se prepara también una cerveza michelada (o cubana), que es un vaso lleno hasta la mitad de jugo de limón con hielo y sal en el borde, al que se le va agregando la cerveza del porrón a gusto. Sin foto esta vez, porque sino se enfriaba la comida.
En Costa Rica
Un vuelo agotador: no se proyectaron todas las películas y al llegar a Panamá el avión amagó el aterrizaje; antes de tocar el piso volvió a ganar velocidad, remontando altitud y luego estuvo esperando dando vueltas en círculo. Y yo justo que me olvidé de llevar mi número de pasajero frecuente.
Sentí el clima tropical apenas me bajé. Caluroso y lluvioso, aunque en comparación, en Panamá estaba pesado. La gente de aquí es notablemente agradable, al menos en lo poco que hablé para llegar hasta donde me quedo.
Obviamente, el sistema de no tener dirección es bastante complicado, para encontrar el segundo punto de referencia hubo que preguntarle a la gente por la calle. Según lo que escuché hay algunas calles con altura, pero son algunas y lo común es adaptarse al sistema de referencia más orientación.
Para mi asombro, hay Denny's en San José (de Costa Rica), tal y como los hay en California. Además, los autos usan caja manual, yo esperaba que fueran automáticos. Todavía no disparé mi primer foto.
Sentí el clima tropical apenas me bajé. Caluroso y lluvioso, aunque en comparación, en Panamá estaba pesado. La gente de aquí es notablemente agradable, al menos en lo poco que hablé para llegar hasta donde me quedo.
Obviamente, el sistema de no tener dirección es bastante complicado, para encontrar el segundo punto de referencia hubo que preguntarle a la gente por la calle. Según lo que escuché hay algunas calles con altura, pero son algunas y lo común es adaptarse al sistema de referencia más orientación.
Para mi asombro, hay Denny's en San José (de Costa Rica), tal y como los hay en California. Además, los autos usan caja manual, yo esperaba que fueran automáticos. Todavía no disparé mi primer foto.
Piratas del Caribe, pero vacunados
Lo que no se vé en la película y sucede ahora, es que para ir de país en país en el Caribe, habría que ir revisando la cartilla de vacunación y ver si están completas; contra la malaria, fiebre amarilla, et cetĕra.
Es así, en algunos circuitos de vuelo como por ejemplo, de Argentina a Panamá y de Panamá a Argentina, se requiere la vacunación contra fiebre amarilla obligatoriamente, se puede obviar si nos quedamos en el aeropuerto. Y yo que quería conocer Soma.
Todos los seguidores y seguidoras de Prison Break pueden unirse en mi reclamo, "esto no lo decían en la serie", y hubiese sido un buen consejo (lo de las vacunas.)
Igualmente en mi casa me dijeron, pero bueno, se me pasó. Ya saben entonces, si no publico regularmente...
Retomo la costumbre de escribir un poco sobre los viajes, y comento que mañana saldré para San José de Costa Rica. Llevaré todo conmigo para evitar la pérdida de equipaje. Me queda pendiente el tema de las vacunas, algunas materias de la universidad y lo otro que me estaré olvidando. No sé bien que adaptador AC usarán en Costa Rica así que llevaré lo que tengo. Tampoco cambié dolares.
Dentro de unas horas, cuando llegue, tendré que conseguir un taxi en el aeropuerto para ir a donde me estaré hospedando, lugar el cual no tiene dirección oficial y al menos si la tiene, no me la pasaron. Para llegar, el taxista tendrá encontrar un punto "conocido" (un comercio) y de ahí moverme 100 metros norte y luego 100 metros oeste. Tampoco llevo brújula.
Estrenaré mi flamante duplicado de pasaporte, aunque para mí es el tomo II.
Es así, en algunos circuitos de vuelo como por ejemplo, de Argentina a Panamá y de Panamá a Argentina, se requiere la vacunación contra fiebre amarilla obligatoriamente, se puede obviar si nos quedamos en el aeropuerto. Y yo que quería conocer Soma.
Todos los seguidores y seguidoras de Prison Break pueden unirse en mi reclamo, "esto no lo decían en la serie", y hubiese sido un buen consejo (lo de las vacunas.)
Igualmente en mi casa me dijeron, pero bueno, se me pasó. Ya saben entonces, si no publico regularmente...
Retomo la costumbre de escribir un poco sobre los viajes, y comento que mañana saldré para San José de Costa Rica. Llevaré todo conmigo para evitar la pérdida de equipaje. Me queda pendiente el tema de las vacunas, algunas materias de la universidad y lo otro que me estaré olvidando. No sé bien que adaptador AC usarán en Costa Rica así que llevaré lo que tengo. Tampoco cambié dolares.
Dentro de unas horas, cuando llegue, tendré que conseguir un taxi en el aeropuerto para ir a donde me estaré hospedando, lugar el cual no tiene dirección oficial y al menos si la tiene, no me la pasaron. Para llegar, el taxista tendrá encontrar un punto "conocido" (un comercio) y de ahí moverme 100 metros norte y luego 100 metros oeste. Tampoco llevo brújula.
Estrenaré mi flamante duplicado de pasaporte, aunque para mí es el tomo II.
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